Ahora que se acerca el día de Muertos en Coatepec, Veracruz, es importante recordar que es una celebración arraigada en la tradición y la espiritualidad de su gente. En este pueblo mágico, donde las calles se llenan de coloridas ofrendas, la religiosidad juega un papel central. Las familias honran a sus seres queridos fallecidos no solo con comida, velas y fotografías en los altares, sino también con oraciones y misas que reflejan la fusión de las creencias. Los altares tradicionales antaño se hacían de 9 escalones aun que ahora se hacen de menos escalones, también esta el arco alrededor de una mesa con un arco o cuatro arcos en la parte superior.
Coatepec, con su legado cultural y su conexión espiritual con la tierra, ve el Día de Muertos como un tiempo sagrado en el que el velo entre el mundo de los vivos y los muertos se disuelve. La comunidad participa activamente en la preparación de las ofrendas, mientras que las iglesias locales ofrecen ceremonias que refuerzan esta dualidad entre la devoción religiosa y el respeto ancestral. Así, en Coatepec, la festividad no es solo un homenaje a los que se han ido, sino también una expresión de la fe, el amor familiar y la continuidad de la vida más allá de la muerte.
En la fotografía se puede ver las tradicionales figurillas de pepita que se usan en los altares.
Fotografía de Mafer.
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